La desidia en el sector Salud sigue cobrando vidas de inocentes. Apróximadamente a las 9:30 de la noche del lunes murió Andrés Fernández en el servicio de Nefrología del Hospital J. M. de LosRíos por presunta mala praxis.
Los especialistas no le habrían realizado un correcto cambio de catéter y eso le generó un paro respiratorio a Fernández, informó el portal en Miami, TVVenezuela.
El joven de 15 años estaba amparado por las medidas cautelares otorgadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Cidh).
«Siguen falleciendo los niños del servicio de nefrología del hospital J. M. de Los Ríos, amparados por las medidas cautelares otorgadas por la Cidh. ¿Hasta cuándo vamos a tener que seguir bordando los nombres de los niños fallecidos en la tela-mural de nefrología?», lamentó la ONG Prepara Familia.
Fernández iba tres veces a la semana al servicio de nefrología del Hospital J.M de Los Ríos. Estaba hospitalizado desde finales de 2018. Su nombre y su informe encabezó la solicitud y el otorgamiento de las medidas cautelares por la Cidh.
El 22 de febrero de 2018 la Cidh dictó medidas de protección a favor de los pacientes del servicio de Nefrología del J. M. de los Ríos y solicitaba al Estado venezolano garantizar el derecho a la salud de los niños.
“Con esta protección internacional se busca garantizar la vida, integral personal y salud de los niños y niñas una vez agotados, sin éxito, todos los mecanismos de protección que existen en el país”, informaron las ONG Cecodap y Prepara Familia.
Fernández había sobrevivido a las intermitencias en el suministro de agua, fallas en la planta de ósmosis, apagones, desbordamiento de aguas residuales y contaminación de la unidad de diálisis.
Fernández es el octavo niño con deficiencias renales del J. M. que fallece en lo que va de año. Con su partida, al menos, 17 niños han fallecido en tres de los diferentes servicios del hospital en lo que va de 2019, informó el portal venezolano Efecto Cocuyo.
